Posted by Anaquitamanchas | No son pocas las veces que se oye decir «Es que yo no sé ni poner una lavadora»… Y uno se para a pensarlo y la verdad es que no hay que dar por descontado que sea de todos sabido qué cajoncito es el del prelavado – a veces está indicado con un I-, cuál es la parte del jabón del lavado- a veces indicado con un II- y, si lo usamos, dónde se echa el suavizante y dónde la lejía. Publicamos hoy esta sencilla información sobre cómo se debe poner una lavadora… En cinco sencillos pasos que se resumen en cinco frases: leer las instrucciones, llenar la lavadora, añadir la cantidad de detergente adecuada, seleccionar el ciclo de lavado, cerrar la puerta y darle a Start.

Sigue estos pasos...
- Lo primero que hay que hacer es leer las instrucciones de la lavadora. Hay que dedicar tiempo a hacerlo, aunque parezca que no, porque así no sólo la usaremos bien, si no que le sacaremos todo el partido y conoceremos todas las utilidades o funciones que tiene.
- Se llena la lavadora con la ropa que anteriormente hemos clasificado y preparado. Llena el tambor pero deja algo de espacio para que pueda moverse la ropa: debes poder, al menos, mover tu puño por encima de la ropa en el tambor. Ten en cuenta que:
- Si se trata de ropa delicada conviene reducir la cantidad de ropa.
- Hay que separar siempre la ropa blanca -o clara- y la de color, para evitar los desteñidos.
- Si lavas una carga combinada, selecciona siempre la temperatura y la velocidad de centrifugado más bajas recomendadas.
- No sobrecargues la máquina porque se puede producir un daño permanente en la ropa: si la ropa no tiene suficiente espacio para moverse dentro de la lavadora, se puede acumular detergente o suavizante y quedan unas «aureolas» de color blanco. Se aconseja lavar del revés: vaqueros, camisetas estampadas y ropa similar.
- Lo siguiente es añadir la cantidad adecuada de detergente y -si hace falta- añadir blanqueante o suavizante. La cantidad de detergente depende de:
- Dureza de agua: si tiene mucha cal hace falta más detergente o un detergente especial.
- Cantidad de ropa.
- Grado de suciedad de la ropa.
- Selecciona el ciclo de lavado adecuado, que dependerá del tipo y cantidad de ropa, el grado de suciedad -para elegir prelavado o no-, si queremos más o menos centrífuga etc. La temperatura adecuada depende de la carga que laves, pero en muchos casos con 30º ó 40º, se logran muy buenos resultados.
- Cierra la puerta y pulsa el botón “Inicio” (Start).
Lavar a temperaturas bajas -si la ropa no está muy sucia- evita muchas veces los desteñidos