
Las manchas de bebidas alcohólicas en las telas tienden a oscurecerse con el tiempo, pero si se tratan enseguida no es difícil lograr que desaparezcan. Lo mejor es sumergir la tela inmediatamente en agua fría con algunas cucharadas de glicerina. Luego se aclara en agua con vinagre blanco y la mancha desaparece.