
El chicle muchas veces se despega solo, aplicándole hielo para que se endurezca. Si no te funciona lo del hielo, prueba con acetona; luego, lava normalmente.
Otra opción es aplicar gasolina sobre la mancha, pues esta actúa como disolvente. ¡Pero ten cuidado de no tener ninguna fuente de calor cerca! Después lava de la manera habitual en la lavadora.